No se vosotras, pero yo odio cuando no tengo tiempo para depilarme y arreglarme las cejas, siento como la mirada diferente y no puedes evitar fijarte en eso.
¿Conocéis el dicho "los ojos son el espejo del alma"? Pues para mí en este caso podríamos decir que las cejas son el marco de ese espejo.
Si no quereis, no hace falta depilar las cejas en profundidad cambiando su forma o anchura., la verdad que yo no soy de las que cambia o estudia la forma de las cejas, simplemente me gusta despejar la mirada eliminando esos pelillos que sobresalen de la forma normal de la ceja, pero a veces cuesta saber dónde empezar o dónde parar así que os voy a dejar un truquito que yo utilizo a veces cuando tengo dudas. Ya vereis que fácil es:
Lo que nos hace falta:
- Unas pinzas de depilar.
- Un lápiz, bolígrafo o varilla.
- OPCIONAL: Un peine (Si tenéis de cejas perfecto, sino, un simple peine normal también puede servir)
- OPCIONAL: Un lápiz de ojos de color blanco, o si no tenéis de otro color (preferiblemente claro para que no se quede marcado).
PASOS A SEGUIR
Lo primero que debemos hacer es lavar nuestra cara, y con un peine peinar las cejas siguiendo la dirección del pelo.
Para establecer la largura de nuestras cejas:
Tomamos un lápiz, bolígrafo o varilla que usaremos de guía, y lo colocamos pegado a nuestra nariz y paralela a ésta. Donde marque la línea es desde donde debe empezar nuestra ceja. Otra opción es establecer la línea en vez de desde la nariz, hacerlo desde el lagrimal del ojo, esto servirá especialmente para las que tienen la nariz más ancha. Si queremos, podemos marcar una línea de referencia con el lápiz para tener en cuenta más tarde a la hora de depilar.
Ahora volvemos a poner el lápiz o bolígrafo pegado a nuestra nariz, pero esta vez lo llevamos hacia el final de nuestro ojo o pestañas,(en la foto os he dibujado un representación de cómo sería). Ahí es donde debe acabar nuestra ceja. Volvemos a marcar con el lápiz clarito para que nos sirva de referencia.
Y ya podemos empezar a depilar estas zonas de la cejas.
No te preocupes si tu ceja es más cortita y no llega a la línea que trazamos desde la nariz hacia el final del ojo. Esto es más o menos una referencia, pero no tiene que cumplirse siempre a rajatabla.
En cuanto a la anchura de las cejas, esto depende del gusto de cada una. Al igual que con la ropa, se establecen modas en cuanto a la forma de las cejas pero es de tu elección seguir estas moda o no.
Lo que si es verdad, es que debes tener en cuenta la forma original de tu ceja ya que si te pasas no quedará natural. Si tienes las cejas gruesas, y le das una forma demasiado fina, se notará y no quedará bien. Un truco para comprobarlo es tomar un lápiz clarito y pintar encima de los pelillos que creemos que nos sobran y mirar si nos convence esa anchura o si por el contrario nos vemos raras.
IMPORTANTE: Muchas veces algunos pelillos de las cejas sobresalen más que otros, o se forma un remolino al principio. Un error muy común es eliminar por nuestracuenta todos esos pelillos, la ceja entonces comienza mucho más adelante quedando como resultado un entrecejo demasiado ancho y la forma de la ceja queda muy fea y extraña.
Lo que debemos hacer en ese caso es peinar de nuevo la ceja hacia arriba para ver bien qué pelos sobresalen, coger unas tijeras y recortar ese exceso para dejarlo al ras de las demás.
Un pequeño truquito:
*Depílate las cejas después de ducharte o darte un baño, ya que el agua caliente hará que los poros se dilaten un poco más y el pelo salga más fácilmente.
Espero que os hayan servido estos truquitos, ¡nos vemos pronto!
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